lunes, enero 10, 2011

La captura no habrá importado tanto; cualquiera con un olfato medianamente decente podría haberte encontrado, acorralado, atado por las piernas. El combate, con toda su gloria y su hambre no podría dar realmente un premio tan sincero a ningún contendiente. La condena que a ti te fue dictada es, auténticamente, mi placer, la flor que había buscado.

Te ataqué con mi piel, a la vieja usanza, cosiendo cada parte de tu carne ajena con una parte similar de la propia, tejiendo tus pestañas con las mías, fundiendo a calor empapado tu labio y lo que quedaba del mío. Las uñas clavadas en la punta de tus dedos, el ojo que deja ciego al ojo, el vientre que se afila un instante y desgarra las vértebras de un solo tirón, el cabello que se esconde ensortijado, entregando, ignorante, su propia identidad.

No importó desde un principio si pensabas rendirte; el castigo nacido, su destino ya escrito, dictaba en todo tiempo que fuera ejecutado de manera precisa, con ánimos templados en la seca lumbrera a la que llamas llantos. No existía una manera de absolver tu condena: no eras tú culpable, tan solo sentenciada, ante un paredón de promesas calladas, jamás pronunciadas, salpicado de sangre venidera que no busca venganza, justicia, ni siquiera un perdón.

Al amanecer, aun tostado de oro, con la orden de proceder con tu pena flotando ya en el viento, dí un paso hacia atrás, uno solo, y te lo arranqué todo. Tu carne palpitante sangró en un mar silente, tus párpados sin ojos lloraron de verdad y tu boca sin lengua, sin dientes, sin encías, se retorció sonriente de dolores ingenuos, de castigos cumplidos.

Contigo desgarrada, del alma hasta los cielos, me dí la media vuelta y nos fuimos alejando. Quedó entre nosotros, tan solo, la roja boda de tu carne y mi carne fundidas y arrancadas, inertes, enteras, viviendo como una, muriendo siendo una; y nunca se movió, nunca dejó un rastro que pudiera seguir siquiera un cazador con olfato decente...

1 comentario:

  1. El segundo textyo que leo, y realmente es impresionante, aunque no actualices mucho, permiteme añadirte a mi lista de blogs recomendados.

    ResponderEliminar